miércoles, 4 de febrero de 2015

Autobiografía

Mi nombre es Isabella Dosman Urdinola, soy caleña y nací el 5 de julio de 1996 en la clínica Imbanaco. Tengo una hermosa familia integrada por mi padre Francisco Dosman, mi madre Guilelly Urdinola, mis hermanos loren, david y silvana, yo que soy la menor de todos. Durante toda mi vida he crecido en un hogar bien formado y lleno de amor.

Mi primer año de mi vida lo pase entre Cali y Roldanillo valle pues ahí estaba ubicada mi finca y mi familia y yo disfrutábamos mucho estando ahí, y desde entonces no me ha dejado de gustar la vida de campo y los animales.
A mis 18 años meses entré por primera vez a un jardín infantil llamado Sheffield Hispano Británico y aunque era la consentida de mis profesoras duré tan solo tres meses ahí.
Fui bautizada a los dos años, un poco tarde por cuestión de ausencia de mi padrino, mi tío Iván Urdinola, quien fue una persona muy importante y especial en mi familia pero que desafortunadamente ya falleció.

Después de un par de meses, ingrese al colegio del Sagrado Corazón de Jesús y como estaba tan pequeña clasifiqué en Nursery.
Al principio, me costó mucho trabajo quedarme sola sin mi mama en el salón, pues siempre fui muy consentida y apegada a ella, pero con el paso del tiempo me fui acostumbrando,  cada vez disfrutaba más y más del aprendizaje, jugando  junto a mis 7 compañeritos.
Recuerdo haber pasado muchos momentos felices en el preescolar jugando, aprendiendo y visitando diariamente la biblioteca después de almorzar en donde mis profesoras Vicky, Gory, Luzma y Martica me leían cuentos infantiles mientras yo me quedaba dormida junto a mis compañeros.

Finalizó el preescolar y era hora de pasar a primero de primaria; yo estaba feliz pero a la vez sentía mucho miedo pues ya iba a dejar de ser una bebe para convertirme en una niña grande, pero en realidad las cosas no cambiaron mucho.
 Con la llegada de primaria, llegaron también las visitas al zoológico, museos y obras de teatro las cuales disfrutaba al máximo.
Tuve la mejor infancia de todas y los fines de semana eran lo máximo porque me iba desde el viernes para Roldanillo con toda mi familia y algunas amistades y yo me sentía muy afortunada de poder disfrutar tanto realizando diferentes actividades como montar cuatrimoto, montar a caballo, jugar escondite y muchas cosas más.
En una de esas visitas a mi finca, cuando tenía 7 años, sufrí un accidente automovilístico; íbamos mi hermana Silvana, mi mejor amiga de la infancia Samantha y la mama de ella quien en ese entonces era la mejor amiga de mi mama, el carro perdió el control y nos volcamos en un barranco. Fue una situación agobiante tanto para nosotras como para nuestra familia. Todas tuvimos que pasar por momentos críticos pero gracias a Dios logramos recuperarnos rápidamente.

Tenía 8 años cuando hice la primera comunión junto con mis compañeros del colegio, fue un momento muy lindo y especial para todos nosotros para el cual nos preparamos muy bien con ayuda de nuestros profesores de religión y el Padre del colegio.

En el transcurso de la primaria tuve muy buenas amistades, amistades que aun conservo. Todos mis compañeros del salón y yo fuimos muy unidos. los viajes que hacíamos juntos eran lo máximo y los disfrutábamos al máximo. Algunos de los sitios a los que recuerdo haber ido son: Calima, Risaralda, Eje cafetero  y diferentes fincas en el norte del valle.

En un abrir y cerrar de ojos me encontraba en sexto de bachillerato, tenia 11 años  y fue un gran acontecimiento para mi pues desde siempre había querido pasar a un salón en el segundo piso de mi colegio, el cual era el espacio asignado para bachillerato, usar el uniforma que les correspondía a los niños grandes y finalmente poderme sentar en uno de esos “pupitres pegados” que tenían los demás.
Con el bachillerato llegaron cosas nuevas, cada vez las prioridades iban cambiando y aunque en algunos momentos descuide un poco mis estudios siempre tuve un desempeño alto.
Recuerdo que en ese mismo año mis amigas y yo formamos un grupo llamado “Las Divinas”, todas estábamos enamoradas de “El Baby”, un niño que no nos daba ni la hora, sin embargo ninguna perdió las esperanzas.
Séptimo de bachillerato fue un año un poco difícil para mi pues mi mejor amiga de toda la vida se cambió de colegio y yo me sentía sola a pesar de que tenia todos mis compañeros a mi alrededor, pero con el paso del tiempo encontré nuevas valiosas amistades con las que crecí y aprendí montones.
En octavo tuve una gran lección de responsabilidad pues por consecuencia de la pereza descuide mucho mis estudios y llegué a perder hasta 8 materias, considero que desde ese momento he mejorado muchísimo pues puse todo mi empeño para obtener buenas calificaciones y recuperar el tiempo que había perdido.

Al cumplir mis 14 años me sometí a una cirugía llamada Surset Gástrico, la cual funciona para bajar de peso y consiste en achiquitar el estomago, pues nunca fui capaz de hacer una dieta y por cuestiones de salud era lo mejor para mi que en ese momento con tan poca edad pesaba alrededor de 75 kilos.   

De la misma manera fueron pasando los años hasta que llegué a 11 de bachillerato, el año más esperado pero mas difícil de todos, no solo por la presión académica sino también por el hecho de que finalmente mis compañeros, amigos de toda la vida y yo nos íbamos a tener que separar después de haber vivido tantos momentos juntos, yo hasta el sol de hoy sigo sintiendo ese vacío en mi corazón pues toda mi vida la pase en el mismo colegio, viendo todos los días a las mismas personas y no he podido superarlo.
Llegó el momento de la graduación y todos juntos asistimos a la ceremonia y a nuestra fiesta de grado que con nuestros padres y tutora preparamos con muchísimo amor.

Al finalizar mis estudios en el colegio, me di cuenta que aun estaba muy inmadura y joven y no sabia en realidad que quería para mi vida por lo que tome 6 meses para pensar muy bien que carrera escoger; primero ingrese a el programa de Diseño de Vestuario en la universidad San Buenaventura en Cali pero al pasar el semestre me di cuenta que a pesar de que me iba muy bien, no era lo que realmente me apasionaba.
Decidí retirarme y empezar una nueva carrera, una carrera de la cual tengo muchas expectativas y con la cual espero llegar a lograr grandes cosas la cual es Ingeniería Agroindustrial.